Las anchoas son un producto en conserva muy socorrido para cualquier momento, pero que también podemos utilizar como un ingrediente más en nuestra cocina.
Hoy os traemos una serie de recetas para que las probéis de otro modo, más allá de tomarlas solas o en banderillas como se hace habitualmente ¡Vamos a ello!
Tostas de anchoa con lechuga y huevo
Con nuestro pan favorito en pequeñas rodajas de bocado y que tostaremos previamente, la montaremos con una base de mayonesa con pimienta y mostaza. Con unos cogollos de lechuga, cortaremos una hoja bien crujiente sobre la salsa y le pondremos una rodaja de huevo duro. Terminaremos con una o dos anchoas según el tamaño del bocado y decoraremos con un poco de eneldo y cebolla morada en juliana. Un toque de aceite de oliva virgen extra ¡Y a disfrutar!
Tapenade de anchoas, albahaca y aceitunas
Esta crema es perfecta para untar en tostas o para mojar unos picos, incluso como aderezo en ensaladas o pastas. Para hacerla, picaremos 300 gr. de aceitunas verdes con un ajo sin el germen. Le añadiremos un par de alcaparras y algunas hierbas aromáticas al gusto. Por último, le pondremos una cucharada de zumo de limón, cinco anchoas y tres cucharadas de aceite. Lo pasaremos todo con el mortero hasta que emulsione bien y salpimentamos al gusto.
Espaguetis en salsa picante de anchoas
Esta receta no es muy habitual en las casas españolas, pero de verdad, merece la pena probarla. Mientras cocemos los espaguetis (unos 350 gr.), picamos dos dientes de ajo bien finos, 6 anchoas y 100 gr. de aceitunas sin hueso verdes y negras. Doraremos el ajo con aceite y le añadiremos las anchoas y las alcaparras que sofreiremos cinco minutos. Le incorporaremos las aceitunas, 400 gr. de tomate en conserva y media cucharadita de cayena. Salpimentamos y dejaremos cocinar 10 minutos. Terminaremos salteando la pasta en la salsa y decoramos al final con albahaca y algunas anchoas ¡A comer!
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